En el corazón del pueblo la antigua hacienda, hoy día cerrada, luce solemne su pasado henequero. Esta zona es muy interesante para conocer la historia de las Haciendas, un período que marcó esta zona yucateca.
En las cabañas te ofrecen alquiler de bicicletas. Hay buenos caminos de tierra hasta Mayapán o los cenotes de Cuzamá, rutas habituales desde aquí. En pueblos como Pixyah, Telchanillo o Tecoh encuentras cenotes muy guapos. Pero si no quieres pedalear tantos kilómetros Sabacché tiene tres cenotes, o dos, por esos rollos de administración que se llevan entre las comunidades. Hay una ciclopista de 8 kilómetros que te lleva hasta a los cenotes. El más espectacular es el Calcuch, el otro es el Tanimax. Tener estos pozos de agua cercanos es un lujazo, siempre un gusto bañarte en los cenotes.